El flúor y el calcio para nuestros dientes

El flúor y el calcio para nuestros dientes

Calcio-para-nuestros-dientesLos dientes, al igual que otras partes de nuestro cuerpo, se van desgastando con el paso de los años. En ocasiones esto sucede por causas externas y otras por carencias en nuestro organismo debidas, a veces, a una mala alimentación. Dos elementos fundamentales en la buena salud de nuestros dientes son el flúor y el calcio.

Beneficios del flúor

El flúor endurece el esmalte dental y repara cavidades reemplazando los nutrientes que se van perdiendo con los años, con lo que conseguimos unos dientes más fuertes. También ayuda a prevenir la caries dental.

Aporte de flúor

Puedes aportar este elemento a tus dientes por medio de ciertos alimentos como el té, pescados, coles o espinacas. También podemos hacer aporte de flúor utilizando pastas dentales que sean ricas en este elemento. Tu dentista también puede hacerte un tratamiento con flúor si lo considera recomendable. Es un proceso sencillo y que dura pocos minutos. Luego debemos evitar comer o beber durante unos 30 minutos.

El calcio y los dientes

Casi el 99% del calcio de nuestro organismo se encuentra en los huesos y en los dientes. La OMS recomienda consumir unos 800 mg de calcio a los adultos y 1.200 mg para los niños en etapa de crecimiento, mujeres embarazadas y mayores de 50 años. Si no se consume calcio suficiente el organismo lo extraerá de los huesos. Esto favorece la osteoporosis y la enfermedad periodontal, ya que el hueso que antes acusa la pérdida de calcio suele ser la mandíbula y el hueso alveolar, por lo que el diente pierde soporte y comienza a tener movilidad.

Aporte de calcio

Para aportar calcio en nuestra dieta necesitamos ingerir productos lácteos, como el queso manchego fresco, sardinas en aceite, frutos secos como las almendras o avellanas y legumbres como los garbanzos y las judías blancas.

Más consejos para cuidar nuestros dientes

Come alimentos ricos en antioxidantes, como pueden ser los vegetales y las frutas frescas. Prescinde en lo posible de alimentos ricos en azúcares o con alto contenido ácido.

El agua ayuda a tus dientes a mantener la mineralización. La deshidratación y la boca seca hace que es esmalte comience a deteriorarse.

Es mejor prevenir y procurar una buena salud para nuestros dientes ya que una vez surjan los problemas deberemos visitar al odontólogo sin demora.